El 28 de enero se inauguró oficialmente el primer punto de suministro de hidrógeno para vehículos de gran autonomía en España, propiedad del conocido empresario Juan Santos, tesorero de la Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicio, CEEES. La estación de servicio aspira a convertirse en un laboratorio de nuevas soluciones, tanto energéticas como digitales, y supone un hito en la senda de la descarbonización de la movilidad en España.
El objetivo es claro: dar respuesta a las demandas de la sociedad, que empujada por las normas comunitarias y nacionales se encamina a una movilidad más sostenible. Este esfuerzo también engloba las nuevas herramientas digitales, que facilitan un mayor conocimiento de los usuarios, quienes ven cómo sus gustos y hábitos son atendidos por una instalación, la estación de servicio, que es mucho más que una acumulación de ofertas y productos.
Fiebre por el hidrógeno
Desde la aprobación de la ‘Hoja de Ruta del Hidrógeno: una apuesta por el Hidrógeno Renovable’, el 6 de octubre de 2020, se han hecho públicos varios proyectos en los que se anuncian inversiones, en algunos casos milmillonarias, para obtener hidrógeno verde.
El director general de CEEES apunta que “hay ocasiones en las que cuando se habla de una transición justa se piensa automáticamente en las cuencas mineras, pero para el sector de las estaciones de servicio la transición energética es como si toda España fuera una cuenca minera afectada por una reconversión”.
Mezquita remarca que la puesta en marcha de la instalación de suministro de hidrógeno “es la constatación del cumplimiento del Plan Estratégico de CEEES, que abre paso a las nuevas soluciones de movilidad. Éste es un ejemplo clarísimo de los avances que está protagonizando la Junta Directiva de CEEES desde hace un par de años. Ésta es la primera de varias realidades que se van a materializar, porque no vamos a parar de innovar y avanzar para ofrecer a los asociados las mejores herramientas y los más innovadores conocimientos para que puedan tomar las decisiones más adecuadas para sus negocios”, enfatiza.
En cuanto a los retos técnicos que ha supuesto la puesta en marcha de la instalación, Mezquita apunta que “el principal reto ha sido hacer algo nuevo por primera vez. Técnicamente ha sido posible y quizá la instalación del módulo ha sido lo más complicado por el espacio disponible y las importantes limitaciones de distancias. (…) También ha sido un éxito en el sentido de que hemos confirmado que en CEEES tenemos la capacidad de llevar a cabo iniciativas innovadoras”.
Explotar las fortalezas de las estaciones de servicio
“Este proceso de descarbonización de la movilidad nos está sirviendo para subir la moral de los empresarios. A veces se nos olvida, pero tenemos las mejores ubicaciones, contamos con el recuerdo del consumidor, que si adquiere un vehículo con una nueva fuente energética irá en primer lugar a su estación de servicio de toda la vida para repostar por primera vez. Ese recuerdo en el consumidor”, asegura Rabadán, “es un activo valiosísimo”.
“Y es aquí donde las administraciones deben darse cuenta de que lo que no podemos es hacernos trampas al solitario. Si la Ruta del Hidrógeno aprobada contempla que en 2030 debe haber 150 hidrogeneras operativas, el objetivo es que se ubiquen creando una malla adecuada para favorecer la utilización de este nuevo vector energético en el transporte terrestre. Y lo más lógico es que se instalen en estaciones de servicio, que son el punto de referencia para el suministro de energías para la movilidad y que tienen los mejores accesos, las mejores instalaciones y el recuerdo del consumidor”, advierte el director general de CEEES.
“Aquí hay dos opciones”, interviene Mezquita, “o se opta por poner chinchetas en un mapa o esta red de puntos de repostaje de hidrógeno se impulsa para convertirlo en un proyecto de tracción. Hay un valor inequívoco en una estación de servicio y es que cualquier producto o servicio que se añada a una estación genera tracción, tanto de forma directa como indirecta, porque el tráfico de vehículos y personas genera negocio, lo que convierte a las estaciones de servicio en los lugares idóneos en los que instalar puntos de suministro de cualquier energía”.
“En cuanto a las ubicaciones de los puntos de suministro de hidrógeno, esa tracción de la que habla Gustavo que se genera en dos sentidos: a nivel interno en el sector, y desde un punto de vista externo, de cara a la sociedad, en cuanto a la demanda de vehículos se refiere. Si las instalaciones son modernas, están bien cuidadas, son amigables y cómodas, será más fácil que los consumidores estén dispuestos a contemplar la adquisición de un vehículo alimentado por hidrógeno”.
“El reto no es llegar a una cifra de hidrogeneras ubicadas sin orden ni concierto, sino que estén en aquellos lugares en los que resulten útiles para la logística y el transporte, en los corredores más utilizados por los vehículos pesados. Y ese es un valor que también estamos transmitiendo a la Administración, todo el conocimiento que tenemos de nuestra actividad, de nuestros clientes para decirles dónde tiene sentido abrir una hidrogenera”, remarca Rabadán.
Artículo original en: https://www.interempresas.net/Estaciones-servicio/Articulos/325737-Estaciones-de-servicio-e-hidrogeno-pareja-de-exito.html